miércoles, 4 de abril de 2012

¿Lo condiciona?




La buena recepción del ciclo Soñando por cantar con la exitosa “fórmula emotiva” que muestra que un remisero o un ama de casa pueden hoy resultar atractivos para la tele, puede llegar a condicionar el foco de contenidos del certamen Bailando 2012 de ShowMatch.
Aficionados al canto y a la música, los participantes de Soñando por cantar encarnan la ilusión de que cualquier persona, verdulero, ingeniero o padre de familia, puede transformar su situación de anonimato en el brillar de los cinco minutos de fama que ofrece el programa.
Con esta receta y un foco centrado en emocionar y promover la solidaridad y el compañerismo entre los integrantes del jurado y los participantes, el público eligió un programa en algún sentido antagonista al ciclo de Marcelo Tinelli.
En ShowMatch, el Bailando se ha nutrido hasta ahora de variadas figuras mediáticas que han caracterizado al ciclo por un sin fin de griteríos, peleas mediáticas entre los jurados y actings de seducción –a veces muy provocadores y no aptos para menores- que tienen muy poco en común con el clima familiar y emotivo que se busca producir en el concurso que lleva Mariano Iúdica.
Esto abre el interrogante sobre cómo será el Bailando 2012. Si Tinelli Insistirá con el mismo tono que viene usando exitosamente hace varios años o si nuevamente producirá un giro a su ShowMatch hacia otra cualidad, tal vez más hacia la emoción que tan bien funcionan en Soñando por cantar.

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